Este miércoles, la propuesta para reducir la jornada laboral en México a 40 horas a la semana fue rechazada en la sesión ordinaria en la Camara de Diputados, donde se pospuso su debate hasta septiembre, en la próxima jornada de sesiones.
Este decreto establece una modificación al apartado A de la Ley 123 de la Constitución para que la jornada laboral no pase de 40 horas y se tengan dos días de descanso por cada cinco de trabajo.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), los empleados mexicanos son los que más trabajan, con más de 48 horas a la semana y generalmente un día de descanso.
Se espera que se retome esta iniciativa en septiembre, que es cuando se llevará a cabo la próxima jornada de sesiones ordinarias.